Comer sano es responsabilidad de todos, y no sólo de los adultos. Tus dientes y encías son partes extremadamente importantes de tu cuerpo y necesitan estar sanos para mantenerse en buenas condiciones. Si no están sanos, no podrán funcionar correctamente y empezarás a experimentar diversos problemas, por lo que tendrá que acudir más frecuentemente al dentista. La clínica Borja Dehesa cuenta con los mejores profesionales de España que están capacitados para solucionar sus inconvenientes bucales.
Ahora bien, es lógico que te cuides comiendo bien y manteniendo tu boca sana. Aquí tienes algunos consejos para comer sano sin perder peso ni renunciar a tus grupos de alimentos favoritos:
La salud dental es extremadamente importante
Aunque tener una sonrisa bonita es importante, tener unos dientes sanos lo es aún más. Si los dientes están sanos, funcionan correctamente y son capaces de limpiar y sostener las encías. Esto significa que tendrá un aliento más sano y menos probabilidades de desarrollar diversos tipos de enfermedades, como enfermedades de las encías, caries y cáncer.
Come alimentos frescos y no procesados
La mayoría de nosotros estamos familiarizados con los beneficios de los alimentos frescos. Sin embargo, los alimentos frescos no siempre tienen que ser locales y los alimentos frescos no pueden elaborarse con productos químicos o utilizando ingredientes poco saludables. Se puede ir un paso más allá y consumir alimentos cultivados con productos químicos o ingredientes poco saludables. Por ejemplo, el maíz no es un alimento fresco y los tomates tampoco lo son. En lugar de comerlos, puedes preparar tomates en ensalada o utilizarlos en conserva. Esto no quiere decir que todos los alimentos frescos sean malos para ti. Al contrario, las verduras y frutas frescas están repletas de vitaminas, minerales y fibra. Además, son bastante fáciles de preparar. Puedes comprar un pomelo fresco en el supermercado y comértelo o utilizarlo en una ensalada. También puedes comprar aguacates frescos y convertirlos en un plato principal.
Facilita la búsqueda de alimentos saludables
Comer sano no siempre consiste en encontrar los productos más caros en el supermercado. También se trata de encontrar los artículos más nutritivos en la tienda. Puedes aumentar tus posibilidades de encontrar alimentos saludables simplemente buscándolos. Si estás en una tienda de comestibles, busca la sección de frutas y verduras con grandes cantidades de vitaminas y minerales. Si la tienda tiene una sección de productos ecológicos, busque también allí. Si estás en un restaurante, busca los productos que parezcan saludables. Si estás en casa, busca siempre productos sanos en los cajones y armarios de la cocina.
Ten cuidado con lo que eliges y con cómo lo preparas.
Cuando tengas la oportunidad de elegir tus propios ingredientes en casa, no dudes en aprovecharla. Sin embargo, a la hora de preparar los alimentos, elegir los ingredientes equivocados puede conducir a un resultado poco saludable. En concreto, utilizar grasas o hidratos de carbono poco saludables puede provocar mal aliento, indigestión, calambres abdominales e hinchazón. Cuando decidas qué servir para cenar, asegúrate de que sea sano. Evite los alimentos ricos en azúcar o sal. Además, es importante elegir alimentos fáciles de preparar.